Ese pequeño punto azul pálido.

sábado, 17 de marzo de 2012

PILARES


¿Conocéis el principio de vuestra historia?
Durante nueve meses estuvisteis en el vientre de vuestra madre. Pero antes, mucho antes, pasasteis millones de años en el vientre de una estrella.

Cada uno de los átomos de carbono que componen el cuerpo de la persona a la que amáis, y el vuestro, se formó en el corazón de una estrella.

Somos, científicamente, hijos de las estrellas.

Después del Big Bang, sólo había átomos de hidrógeno. Esos átomos formaron la primera generación de estrellas, que brillaron durante cientos de millones de años. En su interior se formaron los elementos químicos que sostienen la vida: carbono, oxígeno, nitrógeno. Las estrellas de la primera generación explotaron, esparciendo el polvo cósmico que formaría sistemas solares como el nuestro.

Las tres nubes de gas cósmico que podéis observar en la foto son el embrión de nuevas estrellas. Los astrónomos bautizaron a esa región de la Nebulosa del Águila como “Los Pilares de la Creación”.

¿Puedo proponeros algo? La próxima vez que salgáis a pasear, y veáis una estrella en el cielo, parad unos segundos a contemplarla. Quizás, en su interior, se estén formando átomos que un día cobrarán vida. Quizás, dentro de cientos de millones de años, otro ser contemple las estrellas y piense que alguien en el pasado, mientras observaba el cielo, le vió nacer.
Cuando miro al cielo por la noche, me estremezco al pensar que somos parte de este Universo, que estamos en el Universo, y quizás más importante aún: que el Universo está en nosotros.

Muchos, al mirar las estrellas, se sienten diminutos porque el Universo es inmenso. Yo me siento enorme porque todos los átomos que me forman vinieron de esas estrellas.

Esta conexión es quizás la necesidad más primitiva del alma humana. Necesitamos sentirnos relevantes, necesitamos sentirnos partícipes de lo que ocurre a nuestro alrededor. Estamos conectados con el Universo. Por el simple hecho de estar vivos.

Principia Marsupia(blog)

1 comentario:

  1. "...Cuando miro al cielo por la noche, me estremezco al pensar que somos parte de este Universo..."

    Querida Carmen, tus artículos científicos siempre me motivan. ¡Y con razón!.

    Tocas aquí un tema básico y ojalá que mucha gente leyese esta entrada tuya. Como bien sabes, la Física Cuática nos enseña que esos electrones, procedentes del mismo átomo, allá donde estén interactúan. No quiero ir mucho más allá en la explicación científica ni en las demostraciones que avalan este hecho. Pero me parece importante, para quien lea tu entrada, que sepa que la manifestación de la materia se perpetúa a través del tiempo y el espacio por esta, digamos, simpatía electrónica.

    En este sentido, tiempo y espacio, no serían más que accidentes que configuran la historia de la materia, presente en todo el Universo.

    Bueno, solo quería desbarrar un poco a propósito de tu entrada, que me parece magnifica y, en esta ocasión, esencial.

    Un beso.

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